Poemas de antología 1974 - 2017



Poemas de antología 1974 - 2017
Fernando Sánchez Sorondo
Editorial Vinciguerra, 2017
Poesía, 216 pp.

por Rubén Sacchi

La poesía, expresión cuasi atávica de la especie humana y piedra basal de la literatura, es la gran exiliada de los canales de difusión y los anaqueles de bibliotecas y librerías. Esto sucede toda vez que el canon es establecido por el mercado, un mercado cada día más frívolo y renuente a profundizar en el alma de los pobres mortales. Dada esta pauta, la aparición de Poemas de antología, de Fernando Sánchez Sorondo, es un hecho para celebrar con bombos y platillos, y largos y gratos momentos de lectura.
Una antología personal supone una mirada desde el que hoy somos hacia todos los que fuimos. También una declaración de la perspectiva que mantenemos tras los años; es la renovación de nuestro contrato con la vida y sus valores. Es ese deseo que expresa diciendo “Me gustaría (...)/ tener casa edificada/ sobre roca y no sobre palabras”.
La lucha para derrotar al ego, “perder (...)/ la primera persona del singular”, abandonarlo “como quien se va de viaje de sí mismo”, le otorga una mirada abstracta del mundo, como entidad punible en sí misma: “el mundo sin escarmiento”, asumiendo en esa metáfora la dispensa a todos quienes hicimos de él lo que es.
La pérdida atraviesa sus versos. La nostalgia en Días de Moreno, donde todo se construía con el “barro aquel elemental y divino”, abona la partida del ser amado: “Se fueron tantas cosas con ella,/ que (...)/ no atino a recordar cómo era el mundo” o la de su hermano que “Ahora es un silencio que nos mira/ desconcertado desde una foto” y concluye en la idea soportable que “la muerte son casitas/ adonde se mudan/ los parientes”.
Lo personal troca en lo social. La contingencia vital lo lleva a interpelar al sistema: “...otra vez hay/ seres humanos/ durmiendo en pleno centro/ como si nada como si fueran/ seres humanos como si/ nosotros también lo fuéramos”. Esa mirada empática, y crítica a la vez, es la que atraviesa y da sentido a toda la obra y así, aunque el autor quiera evitarlo, Fernando observa a Fernando.

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